Diferencias de unidades de potencia
HP, BHP, PS, kW y todo lo demás
¿Que contiene una Unidad de Potencia?
Uno de los primeros datos que la gente quiere saber de un coche es su potencia. Quieren saber lo rápido que puede ir y en cuánto tiempo pueden llegar del punto A al punto B. ¿Y cómo se explican estas potencias exactamente?
He aquí el problema. Parece que los fabricantes de automóviles en todo el mundo se han unido en su constante desacuerdo sobre qué unidad de medida es mejor. A continuación, verá una selección de las unidades que se emplean en la actualidad:
- Horsepower (hp) (Caballos de vapor (CV) en castellano) – se podría decir que es la más común y más conocida, y a menudo se mide con un dinamómetro.
- Potencia al freno, una unidad de caballos que tiene en cuenta potencia menos la pérdida de energía basada en la fricción
- Pferdestärke (PS) – una unidad parecida a los hp que se emplea comúnmente en Europa
- Kilowatio (kW) – la unidad preferida por los físicos
- Cheval-vapeur (cv) – equivalente francés del horsepower (caballo vapor)
En primer lugar, ¿cuáles son las similitudes entre estas unidades?
Lo obvio que relaciona a todas estas unidades, sin importar su origen o popularidad, es que todas miden lo mismo, la potencia. Aunque a simple vista albergan una variedad de diferencias, hay algunas similitudes muy sorprendentes.
Potencia y potencia al freno tienen obviamente la mayor similitud de significado. Mientras que caballos es una unidad algo «básica», la potencia al freno simplemente intenta mejorar la precisión al calcular la pérdida de energía de un motor causada por la fricción. Esta era la idea, al menos, pero hoy en día parece ser que las clasificaciones de «caballos» de toda la vida ya lo tienen en cuenta en la actualidad.
PS se emplea en Alemania y se creó como parte de un intento de hacer que la unidad de caballo, que parecía inaceptablemente creada al azar, fuera más métrica. Las dos unidades han acabado siendo muy cercanas, de hecho, ya que 1 PS equivale a 0,98 hp. El cheval-vapeur (cv) también se aproxima mucho al hp, ya que 1 ch equivale 0,99 hp.
¿Y qué hay de las diferencias principales?
Al hablar de diferencias, tenemos que introducir el favorito de los físicos, el kilovatio (kW). Mientras que los fabricantes de automóviles se preocupan de las diferentes medidas, que tienen todas una nomenclatura diferente pero que en realidad se diferencian muy poco, los científicos prefieren usar algo un poco más estándar.
El kW es esa unidad estándar. Una unidad de caballos equivale a 0,74 kW, lo que significa que, al convertir la potencia del coche a kilovatios, el resultado es una cifra más baja. Esto es contraproducente para algunos fabricantes de automóviles, porque quieren que sus clasificaciones parezcan lo más altas posible.
Esta diferencia puede explicar por qué a los fabricantes de automóviles europeos les gusta emplear PS, ya que ofrece una cifra aún mayor que los caballos. Un coche con una clasificación de 400 PS tendría sólo 392 caballos. Ese número más alto llama mucho la atención por alguna razón.
¿Y por qué necesitamos esta clasificación de potencia?
Para algunos conductores puede parecer arbitrario y sin sentido. Si nos interesa el confort, las características de seguridad o el kilometraje del coche, entonces el número de PS o los caballos puede que no nos interese tanto. Pero para otros es imprescindible.
Aquellos que necesiten velocidad tendrán mucho interés en conocer esta cifra, ya que indica lo rápido que irá el coche, y si es una máquina de alto rendimiento o no. También querrán tener idea de lo que se sentirá al conducirlo. Los coches de alta potencia de caballos serán más interesantes sin duda para aquellos que buscan emoción.
Por otro lado, las aseguradoras también tienen interés en conocer las clasificaciones de potencia para poder incluirlas en sus fórmulas para calcular las primas. Un coche de alta potencia de caballos seguramente se verá como más arriesgado, y por ello tienen mucho interés en conocerlo.
Unidades de potencia en la era de lo eléctrico
Al final, quizás los kW tendrán la última palabra. En la medida en que más y más coches sean eléctricos, la clasificación en kWh de la batería del coche es más importante que nunca para los conductores. En la era de los vehículos eléctricos, la autonomía de una carga es la nueva prioridad para muchos. ¿Quedarán nuestras queridas clasificaciones de potencias en el olvido? Sea como fuere, aún es bueno conocer sus diferencias y similitudes.